NUEVA EDICIÓN REVISADA Y CORREGIDA.
Pepita Jiménez es, sencillamente, una historia que podría ser real, pero que sin duda es ideal. Narra la historia de Luis de Vargas, un joven seminarista que se enamora de una hermosa viuda a la que pretende su padre. Pero, aunque, como suele suceder, él sea el último en comprender sus sentimientos, éstos progresan inevitablemente...
Con un estilo delicado y armónico, al mismo tiempo que sencillo, la historia fluye amena y deliciosamente. Y es, sin duda, un fiel reflejo de la concepción del autor sobre la literatura, que considera que debe ser un reflejo idealizado de la realidad, donde incluso el lenguaje debe servir a ese propósito de embellecer y adornar. Juzgado por Clarín como "el mejor prosista contemporáneo", Juan Valera escribe Pepita Jiménez en 1874, "cuando todo en España estaba movido y fuera de su asiento por una revolución radical, cuando más brava era la lucha entre los antiguos y los nuevos ideales". Una pequeña joya de hoy y de siempre.
Una obra clásica imprescindible de la literatura española, recomendada en colegios e institutos.
Juan Valera y Alcalá-Galiano fue un escritor, diplomático y político español del siglo XIX. Empezo tarde a escribir, publicó su primera novela con cincuenta años. Cultivó diferentes géneros. Como novelista creía que la novela debe reflejar la vida pero embelleciéndola, intentando eliminar los aspectos crudos de la realidad ya que la finalidad de la novela es la creación de la belleza. Sus dos temas principales son los conflictos amorosos y los religiosos. Entre sus obras destacan: Pepita Jiménez (1874), El comendador Mendoza (1877), Doña Luz (1879), Juanita la Larga (1896).