Si buscamos una ordenación del mundo poético del Conde, basada en su intención estética y en su significado, encontramos con mucha claridad y pocas excepciones cuatro grandes núcleos: la poesía amorosa de raíz petrarquista; la poesía declaradamente estética que explica la belleza del mundo exterior, incluida la bellleza del amor y de la dama, de raíz gongorina y marinista; las fábulas mitológicas de raíz ovidiana y estilo de Marino y de Góngora; y la poesía vivencial de su interpretación moral del mundo que tiene dos partes antagónicas, los poemas morales y los satíricos, y éstos, dos nuevos apartados, la sátira política y la personal. Queda sola, aparte, por su género, La Gloria de Niquea, aunque unida estilísticamente al gongorismo.
Juan de Tassis y Peralta, II.º Conde de Villamediana, (nació en Lisboa en 1581 y falleció en Madrid en 1622), poeta español del Barroco, de la corriente del culteranismo, aunque se le caracteriza por una estética muy personal dentro de este estilo.
Se decía de él que era el centro de atención en todas las reuniones y que su carisma deslumbró al joven rey Felipe IV, que le nombró gentilhombre de cámara, hombre de confianza. Era rico, ingenioso y poeta, pero al mismo tiempo también provocador, mujeriego y crítico. Utilizaba su habilidad para escribir contra algunos de los personajes más influyentes, como el duque de Lerma o el conde-duque de Olivares, lo que le trajo problemas durante toda su vida.
Villamediana se fué a Nápoles y cuando volvió a Madrid recibió en herecia el cargo de Correo Mayor. Hizo amigos influyentes que asistían a sus fiestas famosas en todo Madrid. no dudaban en acudir a sus fiestas y siguió con sus críticas. El 21 de agosto de 1622 su carruaje fue asaltado delante de su palacio por un hombre que le disparó con un ballesta y lo máto casi en el acto.
Su muerte conmocionó a todo Madrid y nunca se descubrió a su asesino, pero el caso propició todo tipo de especulaciones en los madrileños, desde la venganza del conde-duque de Olivares, por los versos que lo desprestigiaban por toda la corte hasta los celos del propio rey que sospechaba que su esposa, la reina Isabel de Borbón estaba prendada del poeta.
(1936-1986) Fue catedrático de Literatura Española y director del Departamento de su especialidad en las Universidades de Extremadura, Santiago y Autónoma de Madrid. Frecuentó, en sus investigaciones, especialmente dos épocas: el Barroco y el primer tercio del siglo XX. En la primera parcela publicó una treintena de trabajos sobre Lope de Vega, Góngora, Villamediana, Soto de Rojas, Jiménez Patón, etc. También ha editado para Clásicos Castalia las Obras del Conde de Villamediana.