La fortuna que como narrador alcanzó Cervantes con el Quijote no sirvió para abrirle las puertas del teatro de su época, coto vedado para quien no estuviera dispuesto a secundar las huellas de Lope de Vega. Publicados por primera vez en 1615 y nunca representados, estos ocho entremeses, piezas breves teatrales seis de ellas en prosa y dos en verso, constituyen, sin embargo, una cuna del teatro cómico universal.
En ellos despliega el autor toda su capacidad irónica y crítica, con un lenguaje ágil y divertido, ingeniosos diálogos y gran variedad de personajes, a fin de censurar, entre burlas y veras, algunos de los principales vicios, de su tiempo y de cualquier tiempo: la incultura, la corrupción, el poder del dinero, la hipocresía social, todo un vasto retablo de la necedad humana.
Esta edición, a cargo de Eugenio Asensio, se ha convertido ya en clásica por su amenidad a la par que erudición, pues facilita al lector una lectura divertida y contemporánea.
Miguel de Cervantes Saavedra nació en Alcalá de Henares en 1547 y falleció en Madrid en 1616. Fue poeta, novelista y dramaturgo. Es considerado una de las máximas figuras de la literatura española por su obra Don Quijote de la Mancha, que muchos críticos han descrito como la primera novela moderna y una de las mejores obras de la literatura universal. Otras de sus obras son Novelas Ejemplares (1613), Viaje del Parnaso (1614), Ocho comedias y ocho entremeses (1615) y su obra póstuma Los trabajos de Persiles y Sigismunda (1617), en cuya dedicatoria se despide de sus lectores.
Filólogo, humanista, crítico literario y cervantista. Estudió en Madrid Filosofía y Letras y allí se doctoró con una tesis sobre el pensamiento de Quevedo.
Acumuló una profunda erudición humanística y fue catedrático de instituto por oposición, pero no ejerció la docencia universitaria. Cada trabajo suyo hacía avanzar los estudios en la materia y se constituía en clásico. Publicó reseñas, documentos desconocidos y ediciones de raros, además de esta magnífica edición de los Entremeses de Cervantes. Investigó en especial a este autor, pero también a Francisco de Quevedo y fray Luis de León.
Obtuvo el doctorado honoris causa de la Universidad de Lisboa y en 1985 fue nombrado académico honorario de la RAE por su incansable estudio sobre la literatura española.