La transición hacia el modernismo en Hispanoamérica es a la vez ruptura y creación, un modo de acceder a la cultura universal de Occidente. Esta situación supone un proceso de tensión que da lugar a una relativa inseguridad respecto a los modelos. Tal vez este sea el origen de la oscilación de Silva entre un pre y un posmodernismo, con avances y retrocesos que complican su demarcación. Su poesía inicial conservada en el cuaderno Intimidades, nos muestra a un autor claramente romántico, con una profusa influencia becqueriana. Ghiano afirmaba que Silva se situaba fuera del Modernismo guardando sólo cierta vinculación con el simbolismo, que le lleva a relacionarse con la poesía pura.
(De la introducción de Rocío Oviedo y Pérez de Tuleda)