Escrita entre 1349 y 1351, el Decamerón es una colección de cien cuentos que narran siete damas y tres jóvenes de igual condición que, para protegerse de la epidemia de peste que asolaba Florencia en 1348, se refugian en una villa de las afueras de la ciudad. Allí, para entretenerse, se reúnen a contarse historias, a cantar y bailar. Cada día un rey o reina de la reunión impone un tema sobre el que cada uno de los compañeros relatará un cuento... y esto será así cada día durante 10 días (de ahí el titulo griego de la obra), excepto el viernes y el sábado, dedicados a la oración.
Con muy variados temas en cada relato, el Decamerón logró superar hasta tal punto el género de las colecciones de cuentos que le habían precedido que nada explica suficientemente la impresionante modernidad del libro y el enorme placer que produce su lectura. En esta edición Juan Varela propone una selección de los mejores cuentos en una nueva traducción.
Escritor y humanista italiano. Es uno de los padres, junto a Dante y Petrarca, de la literatura italiana.
Hijo ilegítimo de un acaudalado mercader, se crió en Florencia bajo el amparo de su padre. Comenzaría sus estudios en derecho canónico en 1331, pero pronto los abandonaría para dedicarse por completo a las letras bajo la tutela de destacados eruditos de la corte napolitana, como Paolo da Perugia y Andalò de Negro. Frecuentó el ambiente refinado de la corte de Roberto de Anjou, de quien su padre era amigo personal.
En diciembre de 1340, tuvo que abandonar Nápoles a causa de una grave crisis financiera que sufrió su padre. Entre 1346 y 1348 se trasladó a Rávena, en la costa de Ostasio de Polenta y después a Forlì, como huésped de Francesco Ordelaffi; allí, además, conocería a los poetas Nereo Morandi y Checco di Melletto, con los cuales se cartearía tras su marcha.
En 1348 regresó a Florencia, donde fue testigo de la peste que describe en el Decamerón. Un año más tarde Boccaccio se estableció definitivamente en Florencia y comenzó a ocuparse de administrar la herencia de su padre. Durante estos años, además, compondría el Decamerón. El éxito de su obra le valdría ser designado por sus conciudadanos para desempeñar varios cargos públicos: embajador ante los señores de Romaña en 1350, Camarlengo de la Municipalidad en 1351 o Embajador de Florencia en la corte papal de Aviñón entre 1354 y 1365. En 1370 se retiró a Certaldo hasta su muerte en 1375.
Doctor en filología y profesor de enseñanza secundaria de lengua y literatura españolas, profesor asociado en el Departamento de Filología italiana de la Universidad Complutense de Madrid, ha publicado numerosos artículos sobre literatura medieval italiana, especialmente sobre la figura de Dante Alighieri, así como sobre literatura española (Libro de Buen Amor, La Celestina, El Quijote, etc.). Es autor de Introducción a al semántica de la Divina Comedia: Teoría y análisis del símil (2002) y de Dante Alighieri (2006) y se ha encargado de las ediciones de Si yo fuese fuego. Veinticinco poetas españoles traducen a Cecco Angiolieri (junto con Rosario Scimieri, 2000), y de El Decamerón [diez cuentos] y Sátiras y burlas, siglos XIV-XVI en Castalia. Es asimismo miembro fundador de la Asociación Complutense de Dantología.