Escrita hacia 1585, he aquí la heroica defensa de Numancia, capital de los celtíberos arévacos, que en el año 133 a. C. decidieron morir de hambre antes que rendirse a los romanos de Escipión. Con una mezcla de fuentes históricas, motivos literarios, dramas ficticios y proyecciones alegóricas, es ésta una obra que, si bien tuvo poco éxito en su tiempo y no fue publicada hasta el siglo XVIII, desde entonces no ha dejado de despertar interés como paradigma del sacrificio supremo por la libertad frente al invasor. Aplaudida por lectores y crítica por su amenidad y alejamiento de la tragedia erudita senequista de la época y la sobriedad de sus personajes alegóricos, como La Fama o el río Duero, no renuncia Cervantes al efectismo final, como cuando el niño Viriato se arroja desde una torre para no caer en manos romanas, que quedan así derrotadas por su propia brutalidad.
No es La destruición de Numancia una simple reconstrucción arqueológica de un hecho histórico del pasado, sino que Cervantes, con la magia de su pluma, nos presenta una obra llena de personajes complejos y situaciones extraordinarias que hacen las delicias de cualquier que se adentre en sus páginas. Y ahora, gracias a la edición preparada por Alfredo Hermenegildo, podemos leerla en su completa heterogeneidad.
Miguel de Cervantes Saavedra nació en Alcalá de Henares en 1547 y falleció en Madrid en 1616. Fue poeta, novelista y dramaturgo. Es considerado una de las máximas figuras de la literatura española por su obra Don Quijote de la Mancha, que muchos críticos han descrito como la primera novela moderna y una de las mejores obras de la literatura universal. Otras de sus obras son Novelas Ejemplares (1613), Viaje del Parnaso (1614), Ocho comedias y ocho entremeses (1615) y su obra póstuma Los trabajos de Persiles y Sigismunda (1617), en cuya dedicatoria se despide de sus lectores.
Alfredo Hermenegildo (Burgos, 1936) cursó estudios de Filología Románica en Madrid y ha desarrollado su carrera académica sobre todo en la Universidad de Montreal, Canadá, donde es en la actualidad profesor emérito desde 1997. El eje central de sus trabajos e investigaciones se ha centrado en la revisión y valoración del teatro español anterior a Lope de Vega. Entre sus obras destacan, entre otras: Los trágicos españoles del siglo XVI, La tragedia en el Renacimiento español; Nueva interpretación de un primitivo: Lucas Fernández; Antología del teatro español del siglo XVI: del palacio al corral; Juegos dramáticos de la locura festiva: pastores, simples, bobos y graciosos del teatro clásico español; Teatro del siglo XVI y Teatro de palabras: didascalias en la escena española del siglo XVI. En su haber tiene también, numerosos artículos y ediciones críticas, entre las que destaca ésta sobre la Numancia de Cervantes.